
Reconocemos que nos sorprendió. Un pequeño pueblo llamado Edam, en los Países Bajos, que semanalmente durante Julio y Agosto celebra su Mercado del queso, y que le sirve para que sus calles y aparcamientos se llenen de gente ansiosa por contemplar este espectáculo. Un invitado de honor ejerce de anfitrión y junto a una traducción a varios idiomas, el resultado es que nadie se siente incómodo. Buena forma de promocionar este pueblo y vendernos su producto estrella en los puestos de queso aledaños.
Narran los folletos que esta tradición de «recordar» cuando los quesos llegaban al mercado desde las granjas, en caballo o en barca, se retomó en 1989 y hasta hoy. Una banda de música junto a las autoridades, las mozas del pueblo y un montón de veteranos hasta contar unas 90 personas, hacen que esta exhibición sea posible.

Comprobar cómo los expertos pesan los quesos, junto con la negociación de los precios en directo, realizada por el granjero y el comprador, es algo que gusta de ver. Pequeñas degustaciones son ofrecidas al público, que los días soleados aguanta el calor como puede.
La pequeña ciudad de Edam está llena de edificios del siglo XVII, cuando ya se exportaban más de 500 000 unidades de este queso, conocido también como queso de bola por su forma y con su típica corteza de color rojo o amarillo. Alemania, Francia y Reino Unido fueron sus mejores mercados.
El festival se realiza junto a un pintoresco canal, detrás de una hilera de fachadas históricas, donde están los almacenes de queso de Gestam B.V. Kaasexport, la empresa que impulsa esta celebración y que desde 1916, almacena queso, lo embala y lo exporta.
Así está la cosa. Se puede aprender mucho de esta gente, en especial de su forma elegante de vender el queso de Edam.

Queso de bola o Edam. Es un queso de leche de vaca pasteurizada con un mínimo del 40% de materia grasa en el extracto seco. Se madura a una temperatura entre 10 a 20ºC, Mínimo 3 meses de maduración, se recomienda tomar junto a la fruta. De sabor suave, puro y ligeramente salado que con el envejecimiento concentra su sabor.